Amo con la fuerza de los mares los domingos. Levantarte pronto y no tener prisa por nada es uno de los placeres adultos que más me gustan del mundo.
Desayunamos viendo las noticias, es curioso como hemos adormilado nuestro cerebro para poder degustar una tostada con hummus casero mientras en la televisión el mundo se va al carajo. Alucinante.
Luego vienen las tareas cotidianas, cambiar las sábanas, poner la lavadora, ventilar la casa. Además, es reconfortante ver como tus vecinos también dedican el domingo a los mismos menesteres que tú, el patio de luces huele a suavizante y sábanas de todos los colores ondean al viento. Efectivamente, es día de colada.
El resto de la mañana se diluye mientras vemos MasterChef, me encanta, no perdono ni un domingo, es sagrado. Y me hago la remolona para ir a la ducha, otro de esos placeres adultos, ducharte para ponerte un pijama limpio, la paz mental era eso.
Y a lo tonto la hora del aperitivo, mejillones picantes y patatas, a tomar por saco la dieta, y una cervecita fría que nunca me bebo entera, ea, manías. Mientras en el horno hay pasta gratinándose y la casa huele de llorar, evidentemente hay pasta para alimentar a todo el bloque, pero no la vamos a compartir.
Llega la siesta, para los cánidos y el humano macho, y yo mientras os escribo estas cartas, cotilleo vuestros Instagrams y me pongo de fondo a las Gilmore, el día mejora por momentos.
El humano macho se despertará pronto y veremos la tele mientas me pongo mala a pipas, otro clásico, me encantan y me sientan como un tiro, todo no iba a ser perfecto. Discutiremos por la manta, pensaré que tengo que comprar otra y luego lo olvidaré, así hasta la hora de la cena.
Nos miraremos en el sofá y, sin hablar, nos diremos: “algo ligerito ¡eh!” y haré un sandwich de dos pisos y mucho queso, ligerito. Poco a poco iremos poniendo fin a un domingo perfecto, una vez más.
Cosas para picar
La Canción de la Semana
La Canción de Tu Vida | Alex Ferreira
Fue la canción del verano
la canción de nuestra vida
La Compra Innecesaria
Compro muy poco, casi nada, en temporada, ya me tiene que gustar algo mucho para que saque la tarjeta. Me he auto impuesto el comprar en rebajas y ahora me he dado otra liciencia, usar Vinted. Comprar de segunda mano me parece mucho más lógico cuando realmente no necesitas “nada”. Darse un caprichito de vez en cuando hace feliz, pero me parece aberrante la cantidad de ropa que tenemos y que genera la industria para que sigamos comprando sin parar, me abruma. Creo que esto limpia un poco mi conciencia consumista.
El Placer Culpable
Supongo que todos conocéis las pipas del Mercadona, pues eso droga. Solo voy a Mercadona a comprar x cosas que me flipan, ambientador Ropa Limpia, algodones grandes, toallitas anti-transferencia y… ¡Pipas! Por dios, que enganche, si no las habéis probado no lo hagáis, aviso.
La Foto que no subiré a redes
Mi bata y yo os saludamos mientras escribimos esta carta, sin filtro, sin trampa ni cartón.